San Miguel Arcángel.


En la Basílica Catedral, el retablo al fondo de la nave de la epístola, está dedicado, en el nicho central, al arcángel Miguel en estupenda escultura estofada de José Villegas Cora, teniendo a sus lados a San Gabriel y San Rafael. También en la entrada norte, hay un gran lienzo de Berruecos representando la aparición en San Miguel del Milagro. La devoción de la Iglesia Universal y de la Iglesia Angelopolitana a este Arcángel, ha sido enorme a través de los siglos.

Las Iglesias de la Puebla de los Angeles, Tomo I, Eduardo Merlo Juárez - José Antonio Quintana Fernández, Upaep, 2001, p. 323.

El Arcángel Miguel.


Lucifer, el más bello, perfecto y glorioso de todos los ángeles, considerando la hermosura, nobleza y dignidad de su propio ser, su superioridad sobre todas las criaturas; considerando en el misterio que se les proponía el altísimo privilegio reservado á la naturaleza humana, glorificada en el Verbo eterno, cobró envidia. Y, lleno de soberbia, olvidóse de Dios, á quien todo lo debía; y ciego, no sabiendo ya conocer los medios para obtener su felicidad, lanzó aquel grito: Protesto contra el consejo divino. Pretenden que baje, yo me ensalzaré; quieren humillar mi trono, yo lo levantaré sobre todos y seré semejante á Dios (Isaías, XIV, 14).

El grito de rebelión resonó en medio de los ángeles, y millones y millones, deslumbrados como Lucifer por su propia nobleza, confiando en el poder de este príncipe celestial, siguieron sus sugestiones, aprobaron su proyecto, cobraron envidia á la naturaleza humana y juzgaron que la unión hipostática, el oficio de mediador, convenía mejor á Lucifer que á la naturaleza humana, muy inferior á la angélica.

En este punto el arcángel San Miguel, lleno de celo por su Señor, hizo también resonar su voz por la bóvedas del cielo: ¿Quién hay semejante a Dios? ¿Quién podrá rehusar creer y adorar lo que Dios propone á la fe, á la adoración de sus criaturas? -Yo creo y adoro. Y la gran mayoría de las jerarquías celestiales repitió, con la frente inclinada: Nosotros también creemos y adoramos. Una gran batalla, dice San Juan, tuvo lugar entonces en el cielo: Miguel y sus ángeles combatían contra el dragón; el dragón combatía y con él sus ángeles (Apoc., XII, 7)...

Gran batalla... Grande por el número y el poder de los combatientes, grande por los efectos, grande por la verdad que la motivó, grande porque dividió el cielo en dos campos irreconciliables, arrastró al abismo la tercera parte de los ángeles de todas las jerarquías y de todos los órdenes, y aseguró para siempre la felicidad de los ángeles fieles á Dios...

Un momento; pasado el cual, Dios lanzó para siempre del paraíso y condenó al fuego eterno á los rebeldes con Lucifer á la cabeza, y dijo: No subirás, sino bajarás y serás arrastrado al infierno (Isaías, XIV, 15).

El Catecismo Mayor de SS el Papa Pío X explicado al pueblo según la norma del catecismo de Trento por D. Gilberto Dianda, Pbro. Tomo I, Madrid, 1911, pp. 136-137.

Juan de Palafox y el Arcángel Miguel.


En una ocasión, siendo 29 de septiembre, un grupo de indígenas decidió poner a prueba la tan difundida bondad del monseñor. Así que los citados indígenas invitaron a Palafox al pueblo de San Miguel del Milagro y le pidieron que se sumergiera en las aguas del manantial de San Miguel.

De modo tal que, si el obispo lograba salir avante y no se ahogaba en la empresa, refrendaría su acreditada fama de probo. Pero, si en su lugar permanecía en el fondo de las aguas, esto probaría la embestida demoníaca. Así, serían la aguas turbulentas las delatoras de la maldad de Palafox, impidiendo su retorno a la superficie y desmintiendo su afabilidad.

Monseñor se aventó al agua de un solo golpe, mientras la muchedumbre vociferaba: ¡Viva Palafox! ¡Arriba nuestro benefactor! ¡Palafox, Palafox, tu bondad se acerca a la de Dios!

El contacto con el agua helada hizo estremecer a Palafox, sintió que las manos se le iban crispando. Al tiempo que jadeaba, un calambre impedía el movimiento de una de sus piernas. Congelado e inmóvil, apenas escuchaba el eco de la voces de la multitud.

Cuenta la leyenda que, afortunadamente, Palafox salió airoso de la prueba y pronto alcanzó la superficie, demostrando así su dotación de bondad y logrando triunfar sobre las perversas fuerzas diabólicas.

Desde entonces también se dice que San Miguel Arcángel pasó a ocupar el lugar de San Pedro como mensajero celeste del obispo.

Mitos, leyendas y tradición de Puebla. Asociación de mujeres periodistas y escritoras de Puebla. Universidad Madero, Primera edición 2002. México, p.42.

El escapulario de la Merced


El histórico escapulario de la Merced no ha sido inventado por los hombres, sino que la misma Virgen Santísima lo trajo del cielo cuando descendió revestida de él a Barcelona, a ordenar a S. Pedro Nolasco la fundación de la Orden Mercedaria. Santo y noble es, pues, su origen. Por eso los Sumos Pontífices, estimándolo en su justo valor, lo han enriquecido con un gran tesoro de indulgencias...

Su blanco color significa la pureza de conciencia y la santidad de vida que siempre han de tener los que lo llevan en su pecho, si quieren honrar dignamente a María y merecer su protección.

Medita, pues, alma cristiana, en la importancia de este beneficio que María de la Merced ha hecho al mundo y no vaciles en tomar su santo escapulario para que te agregues al número de sus hijos predilectos. Piensa cuál no será tu satisfacción si conservas hasta el fin de tu vida esta santa insignia; con esto te habrás asegurado el amparo y la asistencia de María para la hora de tu muerte.

Despertador mercedario. P. Serapio González Gallego, Manual de devociones, dedicado especialmente a los Terciarios, Cofrades y Devotos de Nuestra Señora de la Merced. Segunda edición, México, 1942, pp. 345-346.

Cuerpo de Bomberos.


Del Cuerpo de Bomberos de la ciudad de México... salió el año de 1904 Albino Serrano quien, en el propio año, propuso al Ayuntamiento de la ciudad de Puebla, que presidía el doctor Ernesto Espinosa Bravo, la creación del Cuerpo de Bomberos; la idea fue aceptada en Cabildo con la advertencia de que la Comuna no contaba con elementos económicos para adquirir ni lo más indispensable. Don Albino Serrano, hombre entusiasta, obtuvo de la fábrica de cigarros El Pabellón Mexicano de la firma Penichet y Cía., de la Compañía de Tranvías, Luz y Fuerza de Puebla, se le prestaran las bombas de mano extinguidoras de incendio cada vez que se necesitasen, y con Severo Hernández, a quien designó su segundo con el grado de cabo y cuatro hombres más, formaron el pie veterano o fundadores del primer Cuerpo de Bomberos, cuyas labores iniciaron el 2 de febrero de 1905, teniendo como cuartel un anexo del Rastro de la Ciudad, en la antigua calle del Río de San Jerónimo -Avda. 7 oriente 400- ... La inauguración fue hecha por el Gobernador del Estado, general Mucio Práxedes Martínez, quien dotó al flamante Cuerpo de Bomberos de una bomba a la que se puso su nombre.

Historia compendiada del Estado de Puebla, Enrique Cordero y T., Publicaciones del Grupo Literario Bohemia Poblana, 1965, México, pp. 450-451.

San Miguel, su fuente.


En 1777 se sustituye la vieja fuente por la artística llamada de San Miguel porque la figura que le corona es la imagen del Arcángel, a cuya protección se encomendó la ciudad desde su fundación; originalmente se construyó al lado poniente de la Plaza, pasándola después -se ignora la fecha precisa- al centro. En 1873, por obras de modernización del Zócalo, fue relegada al jardín de San Francisco. La reivindicación histórica y artística de esta joya colonial, al reintegrarse a su lugar de origen, se debe al Ayuntamiento que presidió don Eduardo Cué Merlo (1961); se reinstaló en el sitio que ocupaba un kiosko de estilo morisco que, naturalmente, rompía la unidad arquitectónica con los portales y la catedral, auténticamente coloniales.

Historia compendiada del Estado de Puebla, tomo I, Enrique Cordero y T., Publicaciones del Grupo Literario Bohemia Poblana, 1965, p. 148.

Santo Ángel Custodio.


El Santo Ángel Custodio que se encuentra en el bulevar 5 de mayo entre la avenida 3 oriente y Juan de Palafox, precisamente en donde está el Puente de Ovando, perteneciente al Barrio de Analco, fue construido durante la Presidencia Municipal de Paredes Moctezuma (2002-2005) es un monumento de arte modernista que tiene una placa con la Cédula Real.

Mide 17 metros de alto... es de color amarillo y tiene unos escalones y unas jardineras con bugambilias que adornan el conjunto, en el último escalón están empotradas unas estrellas de mármol negras que en total son 26... es obra del escultor mexicano Sebastián... Puebla de los Ángeles, a 7 de noviembre del 2003.

Los monumentos de la ciudad de Puebla. Emma García Palacios de Juárez, Serie Fundación, Instituto Municipal de Arte y Cultura de Puebla, 3a edición, 2010, pp. 33-34.

La dedicación de San Miguel Arcángel.





...debemos honrar a todos los soldados del cielo, pero más particularmente al glorioso San Miguel, como a caudillo y capitán de todos, reverenciémosle por la gracia soberana, por la prerrogativa singular, por el oficio que le han encargado, por la fortaleza invencible, por la benevolencia del Señor que le crió, y por la constancia con la que le sirvió en aquella tan reñida batalla que tuvo con el dragón infernal y con todos sus secuaces. Porque no sin causa la santa iglesia le honra, porque conoce que es su particular y propio defensor, y continuo intercesor, y príncipe de la corte celestial... Por tanto cada uno de nosotros y todos juntos reconozcamos a nuestro protector, y alabémosle, visitémosle a menudo con nuestras oraciones, abracémosle con nuestros deseos, inclinémosle para que nos oiga con nuestra devoción, y alegrémosle con la enmienda de nuestra vida. No despreciará a los que oran, ni desechará a los que confían en él, ni se apartará de los que le aman; pues defiende a los humildes, anima a los castos, abraza a los inocentes, guarda nuestra vida, guiános en el camino, y llévanos a nuestra patria, donde Jesucristo, Señor nuestro, verdadero Esposo de la Iglesia, reina con el Padre y con el Espíritu Santo, en los siglos de los siglos.


La Leyenda de Oro, obra editada en París en el año de MDCCCLXVI, tomo III, 144.

Plazuela del Boliche.


En los libros de los Censos la plazuela lleva las siguientes denominaciones: Plazuela de S. Francisco (1689); Segunda Plazuela de S. Francisco (1781); Plazuela del Molino del Marqués de Monserrate (1771); Plazuela del Marqués (1799); Plazuela del Molino de S. Francisco (padrón de 1773 y en 1815).

En el plano de las Ordenanzas de Flon (1796), el edificio al Poniente de la Capilla del Puente está marcado como Casa de Bochas. Bochas (bolas de madera) o boliche (bola pequeña) son expresions esquivalentes a “juego de bolos”. La Casa de Boliche se cita en 1806 y subsistió hasta 1852. La Calle de Bochas, inmediata a la Plazuela, se menciona en 1823. en el padrón de 1832 llaman Plazuela del Boliche a la acera Oriente, y Plazuela de S. Francisco a la acera Poniente. Las dos denominaciones de Plazuela de S. Francisco o Bolichi encontramos en 1851. La forma con i, Plazuela del Bolichi, prevalece a mediados del siglo XIX (1836, 1851, 1854, 1867, 1869 y en la Guía de 1852). La forma literaria con e se usa exclusivamente desde los planos de Careaga (1856-1883): Plazuela del Boliche.

En la Lista de 1850 dicen Calle del Bolichi a la acera Oriente, y Calle de las Carboneras a la acera opuesta de la plazuela.

Las calles de Puebla. Hugo Leicht, México. 7a reimpresión 2006, p. 39.

La Casa de las Bochas 2/2.


Si quieres conocer una historia de esta casa visita el Podcast de este blog: "Allá, frente a la Plazuela del Boliche".

La Casa de las Bochas 1/2.





Los angelopolitanos y, en general, los habitantes del territorio que comprendió la Intendencia de Puebla en la época colonial, no dedicaron tiempo a los ejercicios físicos, les bastó el desgaste de sus energías materiales en el trabajo propio, y guardar reposo los domingos más los contados días de "fiesta de guardar", para reanudar la rutina de la vida.

Así transcurrieron tres siglos. En los comienzos del segundo tercio del siglo XIX (1832) aparece el primer sitio de esparcimiento en la Plazuela de San Francisco (calle 8 norte 1000) donde se jugaba a las bochas -bolas de madera- o bolos, por lo que a ese primer centro recreativo se le llamó El Boliche y a la explanada Plazuela del Boliche.

Historia compendiada del Estado de Puebla, tomo tercero. Enrique Cordero y T., Publicaciones del Grupo Literario Bohemia Poblana, 1965, p. 304.

Fuente de San Miguel.


Fue construida por... don Juan Antonio de Santa María de Inchaúrregui y los maestros de talla de piedra Anselmo Martínez y José Francisco Rabanillo, fue bendecida y estrenada el 23 de junio de 1777. En 1873 se pasó al Paseo de San Francisco y la regresaron al zócalo en 1962, con motivo de celebrarse el Centenario de la Batalla del 5 de mayo, ganada por los mexicanos a los invasores franceses.

La composición de esta fuente es armónica y de proporciones correctas. Sobre un tazón amplio de trazo combinado de curvas y rectas y de sección semejante a la de medio tibor, cae el agua que recibe una taza de piedra también y está soportada en su centro por la columna que forma la base del Santo Arcángel San Miguel (a cuya protección se encomendó la ciudad desde su fundación), y en cuatro puntos por ángeles de tamaño natural que tienen algunos atributos...

Los monumentos de la ciudad de Puebla, Emma García Palacios de Juárez, Serie Fundación, Instituto Municipal de Arte y Cultura de Puebla, 3a. edición, 2010, pp. 78-79.