San Miguel, su fuente.


En 1777 se sustituye la vieja fuente por la artística llamada de San Miguel porque la figura que le corona es la imagen del Arcángel, a cuya protección se encomendó la ciudad desde su fundación; originalmente se construyó al lado poniente de la Plaza, pasándola después -se ignora la fecha precisa- al centro. En 1873, por obras de modernización del Zócalo, fue relegada al jardín de San Francisco. La reivindicación histórica y artística de esta joya colonial, al reintegrarse a su lugar de origen, se debe al Ayuntamiento que presidió don Eduardo Cué Merlo (1961); se reinstaló en el sitio que ocupaba un kiosko de estilo morisco que, naturalmente, rompía la unidad arquitectónica con los portales y la catedral, auténticamente coloniales.

Historia compendiada del Estado de Puebla, tomo I, Enrique Cordero y T., Publicaciones del Grupo Literario Bohemia Poblana, 1965, p. 148.